La gastronomía de Marruecos ha adquirido una gran influencia culinaria de las cocinas mediterráneas y africanas.
Si viajas a Marruecos puedes disfrutar de los dulces árabes. En la repostería marroquí encontrarás los siguientes postres.
Ghriba
Se trata de unas galletas pequeñas y redondas. Estos dulces están hechos de almendras y tienen una textura suave.
Baklava
Es un dulce árabe de pasta filo relleno de frutos secos y miel. En Marruecos encontrarás una gran variedad de sabores.
Bolitas de coco
Te encantará estas galletas con sabor a vainilla, mermelada de albaricoque y agua de azahar. ¡Envueltas por una cobertura de coco!
Cuernos de gacela
No te vayas de este país sin probar un dulce en forma de media luna o como un cuerno de gacela. La masa se prepara con harina de trigo, claras de huevo y esencia de azahar.
Los «kaab ghzal» están rellenos de dátiles o almendras y canela. Envueltos en una masa suave y humedecidos en agua de azahar.
Makrout
Estas galletas de sémola llegaron a Marruecos a través de Túnez. Cuando pruebes este dulce apreciarás los dátiles, la miel y el agua de azahar.
Maamoul
Es un pastel relleno de dátiles y endulzado con agua de azahar y canela. Se decora con un capa de azúcar glas.
Briouats
Son unos pasteles hechos a base de hojas de brick, rellenos de una masa a base de almendras, mantequilla, azúcar, canela y agua de rosas. Estos dulces se hornean y se sirven con miel. ¡También se pueden hacer briouats con rellenos salados!
Feqqas
Estas galletas de almendras y semillas de sésamo se hornean dos veces. ¡Son muy crujientes!
Mhencha
La masa filo se rellena de una pasta de almendras, que luego se enrolla para formar una serpiente giratoria y se sumerge en miel a fuego lento.
Chebakia
Es muy típico probar este dulce con una sopa de harira, sobre todo durante el mes de Ramadán. Pero, también encontrarás este dulce durante todo el año en Marruecos. Es un pastel frito cubierto de miel, agua de rosas y semillas de sésamo.
Briwat
Es pastel frito, triangular, endulzado con miel y relleno de almendras. Es uno de los dulces más típicos de Fes, Meknes y toda la región del medio Atlas.
M’semmen
El M’semmen, también conocido como Rghaif, son unos crepes planos y cuadrados. La masa está hecha de harina, sémola de trigo duro, levadura seca, azúcar, sal, mantequilla derretida y agua.
Estos crepes se sirven con miel y té de menta, aunque también puede rellenarse con carne, tomates o cebolla.
Desde Trip to Help, expertos en viajes, explican que puedes disfrutar de todos estos dulces con un té a la menta.
Un dato muy curioso es que los pestiños andaluces son unos dulces tradicionales de Semana Santa con origen árabe. En la gastronomía marroquí se elabora un dulce similar llamado shabbakiyya.
Los ingredientes de los pestiños también son frecuentes en la repostería árabe, aceite, harina, ajonjolí, ralladuras de frutas y miel.
«Su receta es sencilla pero algo laboriosa de preparar por lo que te recomendamos que elijas un día con tiempo para prepararla además, es una de esas recetas en la que puedes involucrar a los más pequeños de la casa y así pasar un rato muy agradable con ellos en la cocina», informa la revista ¡HOLA!
Las torrijas también tienen origen árabe.
Desde Cinco Días informan que «no existe mucha literatura sobre esta receta, que ha perdurado en el tiempo y cuyos orígenes son árabes. En el siglo XIV, en el estudio de cocina europea Le viandier de Taillevent, escrito por Guillaume Tirel, alias Taillevent, se hablaba de una receta a la que se denominaba tostadas doradas (tostées dorées), que se rebañaban en yema de huevo batido antes de pasarlas por la sartén y espolvorearlas con azúcar».
En Marruecos también puedes probar recetas saladas como el Tayín. Esta receta debe su nombre al recipiente que la envuelve.
Es un guiso de verduras o de carne de cordero y se sirve en el tayín (o tajine), es decir, la vasija de barro.
En este país se usan siete verduras para preparar el cuscús: zanahorias, calabacines, calabaza, pimiento, cebolla, tomates y nabos. Otros ingredientes que no pueden faltar son los garbanzos y carne de ternera, cordero o pollo.
El Khubz ed un pan árabe que tiene una forma ‘aplanada’, ya que no se usa levadura en su elaboración. Los nutricionistas aconsejan el hummus de garbanzos, ya que es un puré saludable a base de garbanzos triturados con aceite de oliva, zumo de limón y semillas de sésamo.